Los alumnos y alumnas de tercero de primaria de nuestro colegio, después de renovar las promesas de su Bautismo en el mes de marzo…siguen caminando.
El pasado viernes 4 de mayo recibieron en la capilla del centro y por primera vez, el Sacramento de la Reconciliación o Penitencia. Después de un tiempo de preparación en las catequesis, a la que asisten todos los jueves, vivieron contentos y emocionados al igual que sus familiares, la celebración del Perdón.
La parábola del “Hijo Pródigo”, representada por algunos alumnos, nos muestra la relación entre Dios y cada uno de nosotros y cómo podemos aplicarla a nuestra vida diaria:
“Cada individuo es como el hijo menor que recibe su herencia (la vida, la familia, etc) y la gasta en malas actividades (el odio, la avaricia, las guerras, etc). Dios, como el padre de la parábola siempre nos espera, con brazos abiertos, listo a perdonarnos y restaurarnos a su familia. Los niños aprenden que si en una u otra forma han fallado delante de Dios, ya sea siendo desobedientes, mintiendo, robando, o en fin todo lo que desagrada a Dios, ellos son como el hijo menor de esta historia”.
Por medio de esta lección los niños se acercaron a Dios, en actitud de arrepentimiento a pedirle su perdón, recordando que como un buen padre, Dios siempre nos recibe con AMOR.
Con el corazón limpio y lleno de alegría, nuestros niños siguen preparándose para recibir a Jesús en el Sacramento de la Eucaristía.